miércoles, 5 de febrero de 2014

Crónica

Coca-Cola controversial

El polémico video de la famosa Coca-Cola, en el que se muestra personas de todo el mundo cantando America The Beautiful, causó revuelo en los Estados Unidos.

Para nadie es un secreto que el conocido Super Bowl es uno de los eventos más esperados y vistos alrededor del mundo. Se espera con ansias, no solo por ser el final de la temporada de futbol americano, sino por los maravillosos shows que se hacen durante la transmisión, este año fue el turno de Bruno Mars con los Red Hot Chilli Peppers. Una maravillosa presentación llena de luces y espectaculares trajes en la que el intro fue realizado por niños agarrados de manos cantando un pedazo de la famosa canción billionare del joven cantante Bruno Mars durante el medio tiempo. 

No sólo es esperado por los grandes espectáculos que hacen los reconocidos cantantes, sino también por los anuncios que ahí se presentan. Para esta edición de Super Bowl, fue Coca Cola la que le tocó sorprender a todos con el estreno de su nuevo anuncio. Durante un minuto se mostró en las grandes pantallas del espectáculo, personas de distintas etnias realizando actividades diferentes y que de fondo tenía el “segundo himno americano”, la canción America the beautiful en 8 idiomas.

Si pues, Coca Cola esperaba ser topic trending  en las redes sociales, lo logró; pero no de la manera que ellos se esperaban. #SpeakAmerican fue como el  hashtag llegó a la cima, usuarios de Twitter resignados por haber abusado de la famosa canción. “Nunca más volveré a comprar Coca-Cola, 'America The Beautiful' solo debe ser cantada en nuestro idioma”, afirmó una usuaria en la red social.
Allen West, excongresista republicano por Florida, expresó que "Si no podemos ser lo suficientemente orgullosos como país para cantar 'América la Bella' en inglés en un comercial durante la Super Bowl, por una compañía tan americana, como se puede ser, entonces estamos condenados al camino a la perdición".

Dichoso comercial no sólo causó una ola de comentarios xenofóbicos, sino también homofóbicos. El ya mencionado excongresista, aludió que la famosa casa de refresco había tenido tiempo de mostrar a una pareja homosexual de diferente raza patinando con su hija, pero no para mostrar un aborto. 

Aunque el anuncio se vio atacado por críticas, algunos usuarios mostraron interés en él o le brindaron unos pocos comentarios positivos. Así fue el caso de Sami Elmansoury, activista político que comentó "Brindaré esta semana con una coca por el hecho de que América es, de hecho, hermosa".

Fuente: http://www.breitbart.com

Artículo de revista

Malos hábitos pueden ser adoptados en las series de televisión

Un estilo de vida soñado

En los últimos tiempos, las series televisivas han influenciado a una parte de la sociedad en Venezuela. Estas series se han vuelto una moda y una manera en la que algunos ciudadanos quieren llevar su estilo de vida (promiscuidad, fiestas descontroladas e infidelidad). 

La televisión se ha vuelto el medio de comunicación más influyente en esta década. La sociedad gira en torno a este espacio y una parte de la sociedad, especialmente jóvenes, ha tomado actitudes que les pueden generar problemas a largo plazo. Este es el caso de las series de televisión. Este tipo de programas, ya sean los reality shows, comedias, etc., se han vuelto una gran moda en el país haciendo que las personas hayan creado una gran adicción a estas.

Una visión más amplia de las series

Series como two and half men, keeping up with the Kardashian y skins, causaron un gran revuelo en el país y provocaron furor en cuento a fiestas, infidelidad y promiscuidad. “La mayor parte de las nuevas vías de comportamiento las impone la televisión”, así lo reseña María Jesús Fernández Torres en su artículo “La influencia de la televisión en los hábitos de consumo del telespectador”. Ciertamente,  estas “nuevas vías de comportamiento” se han visto reflejadas en los jóvenes que aspiran ser como el exactor,  Charlie Sheen, en el cual trabajaba en la serie two and a half man como un millonario que derrochaba su dinero en prostitutas, alcohol, drogas y en fiestas, como las jóvenes y extravagantes millonarias Kardashians que se han visto
vinculadas en temas de promiscuidad y rumbas descontroladas con mucho alcohol o como los adolescentes de la series inglesa skins en la que los actores llevaban una vida acelerada entre reuniones sin control, con exceso de drogas y alcohol, mucha promiscuidad y un sin fin de infidelidades.

¿Qué opinan los psicólogos?

Leticia Guarino, psicólogo egresada de la Universidad Central de Venezuela, expone que “este tipo de programas que se presentan sin ninguna orientación, ofrecen modelajes de comportamientos que, aunque son censurables, están asociados a reforzamientos y estimulación positiva”.

Los adolescentes toman estas actitudes como algo bueno, y que así lograrán un grado de popularidad sin percatarse que a largo plazo estas conductas les pueden traer ciertos problemas.

Guarino también manifestó que no solo son comportamientos inadecuados por parte de los actores, sino que no reciben ningún castigo o penalización en las series, por lo que los observadores aprenden que pueden repetirlos e imitarlos y que no traerá ninguna consecuencia. 

En el país existen ciertas prohibiciones en el tema de alcohol y drogas, incluso el consumo de drogas no ha sido aprobado. Muchas de las muertes causadas en las fiestas son consecuencias del consumo excesivo de estas sustancias e incluso muchas de las peleas, que también han causado muchas muertes de jóvenes, es que por efectos secundarios de las mismas, los adolescentes tienen un deseo de satisfacción sexual y les han sido infieles a sus parejas o por fruto de la misma satisfacción, se han visto envueltos en tema de promiscuidad en una noche.

¿Qué opina la sociedad?

Alejandro Pérez, residente de la urbanización Las Acacias, expone que estas series pueden propiciar malos hábitos en las personas y que , aunque sepan las consecuencias de estos, lo ven como un acto normal.

“Deberían de buscar una manera en la que estos temas no deban ser tratados en las series como un acto de heroísmo. Deberían educar a la sociedad y sobre todo a los adolescentes, que estos hábitos pueden traer problemas graves como enfermedades venéreas, etc.”,  así también expone el ciudadano.

Muchas personas ven las actitudes de los actores normales y que cualquiera puede tener, tal es el caso de Leonel Suárez, estudiante de la Universidad Metropolitana, declaró “yo soy fanático de la serie skins, leí todos los libros de la serie y vi todas las temporadas y de two and a half man vi uno que otro capítulo. Tienen ciertos excesos y admito tener ciertos amigos que si han copiado ciertas actitudes de las series,  pero no es mi caso imitarlos”.

Fuente: http://www.moviemail.com

















miércoles, 22 de enero de 2014

Crónica

La ciudad que viste de rojo

“Apúrate”, me dijo mi hermana mientras agarraba mi maleta que paseaba por las correas del aeropuerto de Ámsterdam. Ansiosa por conocer la ciudad, agarre la maleta con ambas manos y la tiré al piso de un solo golpe para salir corriendo detrás de mi hermana. Era algo impactante e imponente el aeropuerto.

“Mira, eso se lo podemos comprar a Meme”, decía mi cuñado mientras me señalaba unas semillas de girasoles que vendían en el aeropuerto. Estaba impresionada por todo lo que había en el aeropuerto y lo único que le respondí fue: “Cómprale lo que quieras a mi mamá”. Éramos un grupo de jóvenes que tenían entre 17 y 23 años.

Salimos medio rápido del aeropuerto en shorts y franelillas, ya que era época de verano y veníamos de la ciudad de Barcelona donde el calor era insoportable. Cuando pusimos el primer pie fuera, entramos de nuevo corriendo temblando del frío. Nos quedamos un poco extrañados, ¿cómo es que en verano hace un frío tan infernal en Ámsterdam? , no nos importó, ya que teníamos que estar en el hotel a las 12 para la reservación.

Corriendo por aquellas calles, entramos a muchas tiendas a comprar suéteres para que pasáramos más o menos el frío, hasta que finalmente llegamos al caluroso hotel. Hicimos el check in  y cuando ya estábamos preparados para subir a nuestras habitaciones, nos dijeron que nuestra habitación estaba en otro edificio que estaba cerca de ahí. Salímos de nuevo, esta vez ya nos habíamos preparado, ya que mientras hacíamos el check in, nos íbamos cambiando en grupo en los baños.

Llegamos a nuestra habitación, dejamos las maletas y salímos a conocer la ciudad. Es una ciudad realmente bella, así como en las postales. Llena de flores, el río Amstel recorre toda la ciudad, las calles con ladrillos un poco antiguas, las personas paseando en bicicleta, la comida era divina; todo parecía una foto de postales, pero dentro de su belleza, las tiendas de Kama Sutra, era lo que más resaltaba y más se llenaba de personas.  

Hicimos un recorrido por todo el centro de Ámsterdam y después llegamos a la fábrica de la famosa cerveza Heineken, como a 20 minutos del centro. Hicimos, ahí mismo, cerca de la fábrica, un recorrido por el río Amstel. No fue muy impactante ni muy divertido, pero sí fue algo relajante después de tanto ajetreo cuando llegamos.


Se iba haciendo de noche y ese hermoso panorama iba cambiando poco a poco, la ciudad se iba vistiendo de rojo. Por las vitrinas se exhibían mujeres de todas las edades, raza, tamaños, etc., los coffee shops se iban llenando de jóvenes y adultos. La belleza de la ciudad se había convertido en una locura. Las personas drogadas por las calles, las mujeres desnudas en las vitrinas rojas que iluminan toda la ciudad. Esto sí fue realmente impresionante. 

La gente era completamente diferente a la que vimos cuando llegamos. Después de recorrer de noche todo, llegamos de madrugada a la habitación un poco impactados por todo lo que vimos. Nos tomamos una cerveza y nos acostamos a dormir para el próximo vuelo. Fue una experiencia muy extraña, creo que no volvería a aquella locura, pero no me arrepiento de haberla vivido.

miércoles, 15 de enero de 2014

Crónica

La vida de las calles

"¡Pasa por aquí, preciosa!”, “¡Bella tú y bello el carro!”, “¿Estoy en el cielo? ¡Estoy viendo en ángel pasar!". Esas son algunas de las frases que se escuchan a cualquier hora del día en la avenida Guayana en Los Símbolos por el conocido parkero de la zona. Giovanni, así se llama el personaje, es un hombre moreno, bajito, flaco, de un aspecto muy sucio que a veces está ebrio o drogado y rara vez está sobrio porque dice que quiere cambiar.

Tiene un perro llamado “Calle”, que también es conocido por todos en la zona y que por cierto es muy querido, que lo acompaña a todos lados. “Calle y yo tenemos un estilo de vida muy extremo”, comenta. Cuenta que llegó a esta zona por cosas de la vida y porque ya estaba cansado de patear por varias zonas de Caracas porque el viene desde La Guaira. “Un día estaba parkeando unos carros de aquí y Cucho, el dueño de la panadería, me botó como un perro cochino, pero poco a poco le fui demostrando que era un tipo de bien que no quería joder a nadie, no es lo mío pues, yo solo quería trabajar y un día me dijo que me quedara pero que no hiciera nada malo porque me iba a botar de aquí”.

Le dieron un chaleco de parkero para que hiciera su trabajo, pero que cuando hace algo malo, lo castigan quitándoselo por unos días. “Cuando le quitamos el chaleco le afecta mucho y se siente avergonzado. Se siente como un niño cuando lo regañan y poco a poco ha ido cambiando. Ya no se mete en tantos problemas como antes”, dice el dueño de la panadería.

Lleva, aproximadamente, unos 6 años en la zona parkeando los carros que van a la panadería o a la clínica que se encuentra en frente. Los vecinos de la zona ya lo conocen, e incluso, le tienen cariño, aunque dice que muchos lo tratan como un malandro y que eso le molesta porque él no es ningún malandro. “Yo respeto burda, oíste, entonces en bien chimbo cuando viene un becerro y me dice malandro. A ese no le cuido ni le parkeo un carajo, además, esos son los típicos pichirres que te dan una propina de dos bolos, como si con eso comiera mucho”.

 “A Calle y a mí nos toca duro”, dice. “Tenemos que pararnos a las 6 de la mañana a parkear los carros y a cuidar a mi gente, porque esta es mi zona, y tengo que trabajar que jode para poder comer”. Está feliz de vivir y trabajar en un lugar donde, apartando a las personas que lo tratan mal, lo ayudan y muchas veces le dan de comer. Dice que está muy agradecido con Cucho, porque lo ayudó mucho y gracias a él, cambió.

“Esto no es fácil, niña. Dormir en la calle no se lo deseo a nadie y por cosas que nunca debí hacer es que estoy aquí, pero no me puedo quejar. Tengo mi casita ahí con Calle y nunca hemos dejado de comer, gracias a Dios”.